domingo, 12 de febrero de 2012

Ginger.

El blanco preferido de los matones en el patio del colegio. Objeto de burla desde tiempos inmemoriales. Identificado con una verdura mucho antes de haberla probado. La trágica vida del pelirrojo ¿Qué tiene el mundo contra ellos? ¿No se dice nada de esas chicas palillo que van por ahí con el cuello blanco y la cara naranja, pero sí de ellos? Cruzo los brazos y me niego rotundamente. Los pelirrojos siempre han molado, molan y molarán por siempre. Los hermanos Weasley, Pipi Calzaslargas, la inocente Lindsay Lohan de "Tú a Londres y yo a California", los leprechauns, Van Gogh...



Os estaréis preguntando el porqué de este manifiesto pro-rutilismo. ¿Cómo se llama el grupo ese del pelirrojo feo? El grupo al que se refería mi querido hermano era Two Door Cinema Club. Ahora todo encaja ¿verdad? Un grupo como este no tendría que ser reconocido por el color de pelo de su cantante. Nunca. TDCC es mucho más que eso. Una banda britpop, indie o retro. Ritmos con los que mueves tu pierna en el metro inconscientemente. Trazos ocultos de Los Beatles y Twiggy. Olor a disco y a té. Pero poco importa lo que yo os pueda decir, porque grupos como este no necesitan presentación alguna. Su música ya lo dice todo.





¡Adiós bitches!

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